viernes, 1 de mayo de 2009

Nota de Sergio Marchi: "Fricción – Abril 4 – La Capilla"

Comentario sobre la segunda formación del grupo, cuando ésta se presentó por primera vez (4 de Abril de 1987). Por Sergio Marchi, publicado en la revista "Rock and Pop".


Hay quienes sostienen que Fricción es un grupo “overrated”, expresión que en castellano significa sobrevalorado. Los culpables seríamos nosotros (los periodistas) al hablar bondades de una banda que no las tenía. ¿En serio? Bueno, uno es humano y puede equivocarse; en última instancia prefiero correr el riesgo de salir desnudo del casino pero seguir manteniendo el control de mis apuestas en la ruleta de las valoraciones. Muy probablemente las expectativas de más hayan perjudicado a Fricción. Es claro que cualquier suposición a priori es traicionera, como en el momento de hacer por primera vez el amor: esperabas, en el instante de la cópula, ver el cielo repleto de estrellas en incesante explosión y sólo viste una mísera cañita voladora que salió disparada de un envase de sidra que quedó de la noche anterior.

Fricción reacomodó sus piezas y el tablero quedó así armado: Richard Coleman, voz y guitarras; El Gonzo, saxo, guitarra y teclados; Daniel Avila, batería; y Daniel Castro, bajo; agregándoseles en calidad de invitado Roly Ureta en guitarra. Y acá no había expectativa que valiese, siendo la primera vez que se presentaban con esta formación. La teoría de la sobrevaloración quedó destruida; en una actuación formidable Fricción expuso a la luz toda esa capacidad de conmoción que se le adjudicaba prematuramente. El punch rockero de la base Castro – Avila se empasta a la perfección con el aura de misterio y sugestión que viene de la guitarra de Coleman, quien además encontró el tono justo de dramatismo y expresión en su voz (la interpretación de “Héroes” es electrizante). El conjunto termina de cobrar sentido con las intervenciones ardorosas del saxo de El Gonzo y el buen gusto desplegado por la guitarra de Roly Ureta, que sabe embellecer los temas contrastando con el corrosivo sonido de la viola de Coleman.

Material interpretado: los temas más conocidos de “Consumación o consumo” como “Durante la demolición”, “A veces llamo”, “Autos sobre mi cama”; otros nuevos como “Enjaulados”, la versión acostumbrada de “Héroes” de David Bowie y algunos estrenados por primera vez en directo como “Prisión emocional”, perteneciente al LP.

Además de un lleno total en La Capilla, Fricción consiguió consolidarse como grupo y revitalizar su propuesta musical. Mi apuesta personal de los principios me está dando los dividendos esperados. Y pienso que somos muchos los que nos alegramos.


Sergio Marchi

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